lunes, 29 de julio de 2013

Puntos de vista.


 Diferentes puntos de vista.


Abarcar todos, a un mismo tiempo, es imposible ble (al menos por ahora, creo de que).
 Cuantos más mejor, para una visión de conjunto tener.



 En la cocina: centrado en las elaboraciones que me han tocado; con todos los sentidos y sensibilidades puestos… y aun así no puedo dejar de estar, atenta la mente, a las explicaciones ofrecidas en otros menesteres que no me han tocado (sin descuidar, no vaya a ser que sea y se me pase el arroz en un suponer supuesto, las propias obligaciones)… Virollo perdio as veces, un ollo aquí y el otro acolá, un centrado descentrado. Ampliamente se ve más.
 No sé si me explico bien, seguramente no. Ahora bien, funcionando y aprendiendo, bien.

 Uy, uy, uy… Primerísimas rencillas surgidas… Cuando estamos sentados en la teoría, todo va bien… Luego después ya… En la cocina, además de elaborar lo que le toque a cada quién, hay que limpiar lo ensuciado sí o sí.

 Conmigo no va el uy, uy, uy… Desde siempre, tengo como norma básica, al terminar de cocinar: igualito que si nadie hubiese pasado por allí; la cocina recogida e impoluta.
 Claro, muchos se creerán que cocinar es hacer como en el pograma de antena gromenagüer (por citar un ejemplo de lo que la cocina no es), aparece la cocina limpita por arte de birlibirloque, si ja.

 Pues de momento, aprendiendo y funcionando, no es poco. Dedicado.

sábado, 27 de julio de 2013


«Las palabras están bien, Marcus. Pero no escriba para que le lean: escriba para ser escuchado.»

Sensual…


Experiencia olfativa…



 Saber reconocer olores, saber identificar con sabores…


 Para poder mezclar sin igual…



…al gusto de cada quién, al gusto de cada cuál…

 …que no te engañen por no saber reconocer olores y sabores.

Paseando por aquí que te vi.

 Interesante lugar para hacer un picnic… vi
Arreflejado paisaje… vi
La mar salaá… vi
Adiferentes colorines… que te vi

Carisísimas estructuras construidas… vi
Una puerta abierta…
Tiempos… vi

Fíjate, hasta sentí humanidad al pasear por aquí…

 Una persona me contestó: “buenas tardes” al deseárselas yo… iba en bicicleta y sonrió al contestar…
 Todo lo anterior al pasear, caminando que te vi…

miércoles, 24 de julio de 2013



     «21. Sobre la dificultad del amor

        Marcus, ¿sabe cuál es el único modo de medir cuánto se ama a alguien?
    ─ No.
    ─ Perdiendo a esa persona.»
«En esta sociedad, Marcus, los hombres a los que más admiramos son los que ponen en pie rascacielos, puentes e imperios. Pero en realidad, los más nobles y admirables son aquéllos capaces de poner en pie el amor. Porque es la mayor y la más difícil de las empresas»

Mermelada de pimiento rojo.



  Para acompañar sobre las tostadas del desayuno, o no.
 Quizá, pintar en rojo pasión a trazos ligeros sobre un asado, para acompañar otros platos…
  Suena raro, sorprendente sabor.

 Mermelada de pimiento rojo:

    ─ Necesitados:
·       Medio kilo (500 gramos más o menos) de pimiento rojo (puedes emplear pimiento verde, si bien en este caso nunca te saldrá la mermelada roja; o pimiento amarillo, aunque tampoco saldrá de color rojo la mermelada; o también utilizar pimiento rojo, verde y amarillo a partes iguales… no sé cual será el colorín resultante, averiguaremos mezclando…) limpio y despepitado.
·       Cuatrocientos gramos de azúcar (mejor si es morena y de caña, mucho más sana que la refinada… uyyy, la refinada, mírame y no me toques… Aquí hay que tener en cuenta que el azúcar moreno cambia el colorín en el resultado final)
·       Zumo de un limión.

   ─ Elaboramos, aproximadamente asín:
·       Lavar y despepitar el me importa un pimiento a uno, dos o tres colores. Trocearlos.
·       Poner lo anterior a lo siguiente en una olla (sin que se te vaya la olla, oye, que no se te escape)
·       Bueno, veremos a ver lo que sale. Pensé, sin ser el siguiente paso de la receta.
·       Una vez el pimiento troceado en se me va la olla, incorporar el azúcar. Mezclar mejor que bien, con saña y todo, remover.
·        Dejar reposar después del torturamiento del mezclado anterior: dos horas de tranquilidad.
·       Una vez reposado, añadir el zumo del limión y volver a mezclar con saña, vamos, como si le tuvieras un poquitín de rabia (y aun así, primando el cariño siempre… cocinar, vivir, ser, crecer, seguir, amar)
·       Después del reposo anterior: ponemos al fuego y llevamos a cocción lenta durante cuarenta y cinco minutos, removiendo siempre (tanto tu propio interior, pensarás lo que quieras pensar mientras remueves, como lo que estás haciendito…)
·       Conseguir una consistencia espesa para la mermelada es el fin de la receta.

 Luego después podemos triturar y tamizar, lograr textura fisna, sin tropezones…
 En la nevera se conserva esta mermelada hecha dos semanas, incluso tres… aséptica, sin tropezones… me caigo muchas veces, al suelo de bruces voy… luego pues me levanto, magullado… 

sábado, 20 de julio de 2013



   «Me gustaría enseñarle a escribir, Marcus, no para que sepa escribir, sino para convertirle en escritor. Porque escribir libros no es nada: todo el mundo sabe escribir, pero no todo el mundo es escritor.
  ─¿Y cómo  sabe uno que es escritor, Harry?
  ─Nadie sabe que es escritor. Son los demás los que se lo dicen.»

Para acompañar…


… Postres, segundos, primeros…

            ─ Reducción de vinagre de Módena:

             Ingredientes:
  • 200 ml. Vinagre de Módena.
  • 70 gr. azúcar moreno.

Elaboración:
  • Verter en la sartén los ingredientes en el orden correspondiente. Primero el líquido y luego después el sólido.
  • A temperatura media sin dejar de remexer, durante unos quince minutos o asín… La cosa viene siendo asín: textura no líquida hay que conseguir; un punto de espesura, sin pasarse… teniendo en cuenta que el enfriamiento acentúa la espesura…

 No te vayas a decreer que es fácil el punto de acompañamiento…

Mente, Filiza…


 Como Bond, James Bond.
 Mejor, Mucho Más Mejor.
 Mente, Filiza, mancuentro FilizaMente.
 Aprendiendo en la cocina.
 Fíjate, hasta me sobra el descanso, tengo ganitas de volver ya.
 ¡Emocionante!

 Sus propongo un primero a probar:

                                           CREMA VICHY

        ─ Ingredientes (para 4 ó 5 personajes necesitamos):

  • Un litro y medio de agua, o de caldo.
  • 100 gr. de mantequilla.
  • 100 gr. de puerro.
  • 500 gr. de patácolas.
  • 500 gr. de zanahorias, para la vista (¿has visto algún conejo que llevara gafas?)
  • Sal, al gusto.
  • Picatostes de pan (ya tu sabes, chamo, o no. Cuadraditos de pan fritos) para presentar.

       ─ Elaboraçao:
  
       ·       Lavar y pelar patácolas y zanahorias varias. Picar en brunoise (para entendernos, cuadradines muy      chiquitines).
·       Lavar el puerro. Cortar en rodajas, más bien finas.
·       Derretir la mantequilla a fuego suave. Una vez derretida…
·        Añadimos el puerro y lo sudamos (es decir, lo reogamos dejando que suelte sus interioridades y jugos varios) durante cuatro o cinco minutos sin parar de remover a fuego medio.
·       Agregar las patácolas y dejarlas hacer un minutillo u dos, poca cosa, removiendo el asunto.
·       Añadir el agua (o caldo en su caso).
·       Sazonar, al gusto de sal (un puntito de pimienta negra no le irá nada mal, aunque sea apreciación propia puesto que la receta original no lo contempla… claro que en la cocina si solo contemplas, fatal o incluso peor pienso de que)
·       A partir de que toda la mezcolanza anterior empiece a hervir de nuevo, dejar cocer unos veinte minutillos a fuego medio.
·       Escurrir.
·       Triturar con la túrmix (conocida más comúnmente: como la batidora de toda la vida de casa…).
·       Una vez triturado, pasar por el chino (noooo, no hace falta que vayáis al comercial más cercano regentado por un chino para que lo pruebe… un chino en cocina viene siendo un artijulio en forma de cono con agujeritos pequeñitos que se utiliza para colar) para tamizar.
·       Listo para presentar está.

 En el caso, de ser el caso, de seguir la receta anteriormente expuesta, sugerencias de presentación:

  • En copa de cóctel: ¿Por qué no? Eso sí, previamente sumergida en agua caliente para mantener temperaturas a la hora de servir en su punto.
  • En plato sopero, también. Calentado, unos minutos con agua caliente (antes de servir).
  • A no ser que quieras servir en frío. Refrescante.
  • Añadir picatostes, en gustando de ellos, oye.

 Acompañar, o no, con sutil reducción de vinagre de Módena…

domingo, 14 de julio de 2013

viernes, 12 de julio de 2013

Sesenta horas.


En cómputo global, 58 de ellas: excelentemente empleadas; mejor impartidas; muy aprovechadas; conocimientos acrecentados en muy buena medida… Rozando el sobresaliente para la Maestra.

 En particular, me sobran 2: ridículas; mal empleadas; peor impartidas... Un dos, siendo generoso, para la impartidora (puesto que de maestra tenía menos que cero). Para cubrir expediente (es imposible aprender nada así, lo odio). Siendo el tema a tratar importante, nunca merecedor de tanta desidia y dejadez… Eso si, sus buenos dineritos se habrá llevado la muy sinvergüenza…
 Saqué en claro en las dos últimas horas ¿lo qué? Pues menos mal que la mayoría de los puntos a tratar los había explicado ya, mejor que bien, la Maestra anteriormente… si no saldría igual que entré pero, eso sí, con el expediente cubierto y un carnet nuevo…

 Por otras partes: algunos, muy pocos, están por estar (pssss, anda ya que me voy a poner a aprender…); otras, al menos una, seguramente por obligación (mostrando mucho interés en aprender, aunque sea por obligación); también alguno hay que se cree saberlo todo y no necesitar nada más…

 Y yo ¿qué? Sin dudar: quiero aprender mucho y bien; estoy porque quiero estar; he tenido la suerte de poder estar; aprovechar la estancia al máximo, quiero, en ello estoy…

 Particularidades: se exige puntualidad…
 en punto para entrar significa: puedes llegar un poco antes si así quieres; y sino en punto puedes llegar; en el caso de llegar, aunque sea tan solo un minuto, después de en punto es que llegas tarde, y punto.
 Quejas referentes a particularidades emitidas: “pero es que no es justo, llegué puntual, tan solo eran y un minuto”… Ay, señor de los anillos, así nos va… ya no se sabe ni el significado de ser puntual… En un suponer supuesto, de las suposiciones de toda la vida, tengo un billete de tren para en punto: llega a un minuto después de en punto; puedes ir corriendo a ver si te abren para entrar mientras ya salió de la estación; o también puedes ir a quejarte a la ventanilla de reclamaciones, explicando que llegaste puntual un minuto tarde, a ver si tienes suertiña y te hacen caso…

 De sesenta, cincuenta y ocho está mejor que bien.

martes, 9 de julio de 2013

Teóricamente…


 Para empezar, es necesario conocer la teoría.

 ¿Cómo pedirías un chuletón, entrecot o solomillo en cuestión de hechura? Como te guste, supongo yo (ya ves que lumbreras en suposiciones, pero ¿a que no me equivoco?...)

 Ahora bien, a la hora de pedirlo ¿sabías que, teóricamente, hay cinco maneras de presentación? (yo no, la verdad) A saber:

 ─ Vuelta y vuelta: interior rojo y ligeramente caliente.
 (Añadiría a la teoría: un poquito, muy poquito, sangrante; un ligero mareamiento en la plancha o sartén; ¿Cuánto tiempo dejar hacer? Pues justo así como muy poquito, o un poquitín más, adependiendo del grosor del pedazo de cacho de trozo de carne…)

 ─ Poco hecho: interior rojo y caliente.
 (No se aprecia casi ya la sangre; dejar hacer un tiempo prudencial evitando que se pase al siguiente punto ¿Cuánto tiempo? Así como un momentito, u dos, más que en vuelta y vuelta…)

 ─ En su punto: interior rojo-rosáceo y muy caliente.
 (Sin sangre ya, es que está muerto del todo el peazo de cacho de trozo de carne; tiempo estimado de hechura: a buen ojo, y muchísima práctica para acompañar la teoría, del que lo haga…)

 ─ Medio hecho: interior rosa y muy caliente.
 (Viviendo en los mundos de yupi en el interior, todo es color de rosa; el solomillo, chuletón o entrecot olvidó ya padecimientos anteriores… Tiempo estimado de llegada al medio hacer: práctica, práctica y más práctica…)

 ─ Muy hecho: interior pardo y quema.
 (Para los carnívoros que se deleitan con las carnes casi crudas: ¡pero serás mula parda! Una carne desperdiciada cuasi quemada; y aquí tengo que discrepar con los carnívoros que se deleitan con las carnes casi crudas, los dragones no comen carne cruda siendo carnívoros hasta el tuétano… además, me vas a decir tu a mi como me gusta la carne si ¡Ja!... ¿Tiempo estimado? Rato largo, sin pasarse hasta el punto de parecer carbonizado…)

 Práctica, práctica y más práctica necesita la teoría.
 Ya sabéis, amigüitos, pedir con sabiduría y conocimiento un entrecot, solomillo o chuletón… no vaya a ser que sea pedir al punto y os sirvan un medio hecho, por faltar el conocimiento de la teoría.

 Teóricamente lo entiendo, incluso me resulta fácil asimilar conocimientos…

 Practicar. Hace unos días cociné en la plancha unos solomillos (antes de conocer la teoría) y salieron “en su punto”… si bien, hoy quiero confesar (me enamora la cocina), me hubieran gustado más “medio hechos” hablando con propiedad.

 Aunque me repita, repitiéndome, pedir lo que realmente quieres paladear: vuelta y vuelta; poco hecho; en su punto; medio hecho; muy hecho…

 Teóricamente… practicar. 

viernes, 5 de julio de 2013

Curiosidades conservacionales…


 Pues resulta que sí. Completamente ignorante ayer, o casi, hoy ya no tanto.
 Ayer sabía que muchos alimentos llevan aditivos artificiales para su conservación, y no sabía más… hoy sé, siendo en el ayer cuasi ignorante, mucho más.

 Conservación de alimentos por aditivos artificiales añadidos, a saber:

·       Colorantes:
 - E-150: el caramelo (ese que da un color como así marrónoscurocasinegro, lo lleva la bebida esa de burbujitas, la que produce chispas de la vida en la publicidad, siendo en la realidad cuasi veneno), para su fabricación se utiliza, entre otras cosas, amoníaco… Provoca alteraciones sanguíneas y déficit de vitamina B6
 - E-171: se emplea en decoración de pasteles y productos deshidratados industriales. Que lo sepitas, afecta su consumo al hígado y al riñón.

·       Conservantes:
 - E-249, consecutivamente hasta el E-252: formados por nitritos y nitratos. Tienen efectos cancerígenos, alérgicos y asmáticos.
 - E-220 hasta el E-228: compuestos de sulfitos, todos los vinos (aunque sean ecológicos) los llevan… pueden provocar diarrea, urticaria, vómito o dolores de cabeza (en pequeñas dosis consumido, claro, no confundir con beber tres botellas de vino en cuyo caso la causa del vómito o el dolor de azotea es claramente otra…)

·       Antioxidantes (mentiroso nombre llevan estos, puesto que al ingerirlos favorecen todo lo contrario):
 - E-338 hasta E-341: fosfatos, ni cortos ni perezososos provocan descalcificación de los huesines, amén de problemas digestivos (para que luego digan que la bebida esta de burburujas, tan desconocida en sus malos efectos sobre la salud como conocida publicitariamente y consumida, es buena para las digestiones… ¡Si, Ja!) conlleva su consumo habitual seguro, mira la etiqueta  sino te crees que lleva fosfatos …

·       Potenciadores de sabor:
 Más conocidos por glutamato (“Glutamato Yeyé” noooo, ese era un grupo de musiquilla que ¿cantaban y tocaban?: “ouououoo, tienen hambre y frío, ouououoo…”).
 - E-625 a E-630: pueden provocar escalofríos, dolores de espalda, jaquequitas, espasmos musculares y palpitaciones (y no precisamente por escuchar su música, más bien por un consumo excesivo). Toda la comida en casi todos los restaurantes chinos lo llevan. En la comida precocinada de los supermercados siempre presente.

·       Edulcorantes:
 Aspartamo E-951: ¡doscientas! (te lo pongo en númaros si quieres, 200) veces más endulzante que el azúcar (fíjate, si el azúcar en si es mu malamente, ¿Qué será esto? Peorísimo si consumes mucho, aun consumiendo poco es malo). Influye, nada menos y nada más, en centros nerviosos del encéfalo que controlan el apetito y la saciedad  descompensándolos… También presente en la cosa esa con burbujitas…
 Sacarina E-954: 500 (ahora te lo pongo en letritas, ¡quinientas!) veces más endulzante que el azúcar… lo peor de lo peor. Está prohibida en la Francia y en el Canadá, en los Estados Unidos esos que nos desunen, llevan una etiqueta con la advertencia de piligro piligroso para la salud.
 Ciclamatos E-952: están presentes en refrescos varios, yogures y productos Light… resulta que en si mismos no se sabe si son malos, pero lo que sí se sabe es que potencian los efectos cancerígenos de otras sustancias al combinarlas. Anda que no ¿creías que las burbujitas esas no llevan? Ehhhhh, error.


Resulta que es muy complicado alimentarse bien, sobre todo cuando no se conocen muchas informaciones. Ahora bien, en sabiendo, al ir a comprar alimentos me pararé un poco bastante mucho más.  

jueves, 4 de julio de 2013

Naranjitas y limiones.


 Fíjate.
 Resulta que la naranja, aun siendo alguna dulcísima al paladar, es ácida.
 El limión, sin dudar al paladar, ¿ácido es?
 Hasta aquí, Perogrullo ¿non si?

 Pues bien, vamos al meollo del cogollo del asunto de la acidez (noooo, que no tomo ácidos de esos de alucinar que aluminas… aunque en ocasiones pudiera parecer de que sí, es de natural mente la locura propia…), a lo que te voy:
 
·       La naranja, aunque en ocasiones no lo parezca por su dulzura en el paladar, ácida es: no solo por fuera; al ingerirla y digerirla en los adentros, siempre (aun acompañada de una cucharada de miel… el azúcar, ni sus ocurra utilizar, es tan malo malísimo como los lácteos, quizá mucho más) es ácida; al digerirla provoca acidez.
·       ¿Acidez en el interior del cuerpo humano?: lo peorísimo para la salud; así se desarrollan malignidades varias a sus anchas, en un medio ácido…
·       El limión ácido al paladar es, sin lugar a dudas… Ahora bien: una vez ingerido y digerido, en todo lo contrario se convierte; contrarresta mejor que bien la acidez… viene siendo más o menos así: que se vayan jeringando malignidades varias, que me tomo un zumo de limión mezclado con el de la naranja para evitar y no padecer acideces.

 Resumiendo (ojalá supiera escribir y expresar más mejorísimo): en el caso de que te tomes un zumo de naranja recién exprimido, acompáñalo siempre mezclado con medio (o entero) zumo limión.

 Otras curiosidades sobre naranjitas y limiones: en aquellas ocasiones en los que la piel de tales empiecen a crear aquel verdín (¿a quién no se le han estropeado? Que levante la mano y lo vea yo desde aquí…) no tirar a la basura… sencillamente arrinconar, en un lugar del jogar, hasta que empiecen a oler peor que mal… sueltan antibiótico natural, penicilina natural para ser exactos, para respirar de forma natural… Todo natural sin recurrir a lo artificial.

miércoles, 3 de julio de 2013

¡La leche!...


 viene siendo una cosa muuu mala que no se mata ni con piedras ni con palos.

 Al parecer… nos explicó hoy pero que muy bien… el cuerpo humano no asimila ni metaboliza, en general, la leche de vaca ni, en particular, los lácteos: quesos y marquesos (creyéndose estos últimos, por pertenecer a la nobleza y aun algunos azules, mejores que los primeros, plebeyos ellos, oyes); yogures y yogurines (aunque estén de muy buen ver, o asín se lo crean ellos en su interior y muchos al verlos en su exterior también); bios, bífidus y demás lácteos… yuyu; saca, bicho malo.

 ¿Lácteos? Principalmente el organismo no puede asimilarlos. Suelen ser la causa de obstrucciones intestinales y malas digestiones, especialmente en aquellos organismos sensibles que no conocen, no saben, lo muuu malísimos que pueden llegar a ser los lácteos.

 Pero ¿Qué me estás contando, y la leche materna qué?... Ah, pero es que la composición de la leche materna humana no es la misma que la de la vaca, no.

 No, si yo hace años que no bebo leche, si era por preguntar para saber más.

 Y la leche de soja ¿Qué? Uy, pues tu verás si la quieres tomar… sencillamente, transgénica…

 No (después de dejar de beber leche de vaca, una temporada me pasé a la leche de soja), si yo hace años que no bebo leche, si era por preguntar para saber más.

 ¡La leche! De lo que se entera uno, u dos…

 Como dijo ella, oye: “prueba a dejar los lácteos una temporada, comprobarás si te va bien ¿Qué pierdes por probar?”