miércoles, 11 de agosto de 2010

ESTRELLAS FUGACES.

Estábamos tumbados, bien pertrechados (mantas, almohadas, abrigados), la noche era clara. Perfectamente bien se veía la Vía Láctea, en el césped semiseco, tumbados. Es que no llueve, hace mucho que no llueve.

Mirando las estrellas, algunas fugaces: una; dos; tres; hasta cuatro vi… El mismo deseo pedí con cada una de las que vi.

Estrellas fugaces vistas.

Deseos pedidos.

¿Concedidos?

Tiempo. Lágrimas. Perseidas.

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