domingo, 8 de mayo de 2016

Perdona, bonita…

¿Rubia teñida yo?

Si, ja. Te creerás tú que, además, tonta del bote… anda, anda, que no andas naaa. Con peorísimas que tú me he peleao yo, con mi rubiez de natural mente clara, y tuvieron que usar tintes a mansalva para ocultar canas mil que le fueron saliendo en las lides a tumba abierta tenidas, y teñidas ellas, oyes. Que lo sepitas.

¿Lo propio? De natural es asín, las canas disimulan muy requetebién con la rubiez natural de pensatible. Es más, incluso cuando una se enfrenta a batallas perdiditas contra las poderosamente teñidas en los afueras, siendo de rubiez en natural mente se ganan las guerras… ¿o no? ¡Oh, sí!

Ayyyy, que me voy (no siendo de dolor el irse, precisamente todo lo contrario…), cuantisísimo necesitaba despacharme a gustirrinín.